La cosmética que conlleva a realizar procedimientos clínicos orientados a exhaltar color (blanco), tamaño (grande) y forma dental (rectangular) y la «estética» que a diferencia de la anterior, se énfoca en devolver los tejidos dentales perdidos o desgastados por diversas razones y/o mejorarlos presentes en función, forma, color y tamaño intentando simular los dientes naturales, tanto que se torna difícil para el observador, clínico y paciente diferenciar los dientes reales de los artificiales.
Ésto se logra incorporando la «macro» y «micro» textura característica de los dientes naturales, donde algunas depresiones, elevaciones y rugosidades permiten absorción o reflexión de luz en determinadas zonas del diente, situación determinante en el dinamismo de la sonrisa.
Adicionalmente, juega un papel fundamental el análisis facial, de sonrisa y de dientes adyacentes y antagonistas; sólo así se logra armonía entre la macro y microestética. que deben ir de la mano con la función y longevidad o mantenimiento en el tiempo de las restauraciones realizadas.